“Pretendemos ser la comunicación del siglo XXI”, exhorta un portavoz de la compañía californiana para informar las novedades. WhatsApp se pone al día y al igual que sus enormes competidores, WeChat y Line, admite llamadas de voz.
Es cierto que ya se lograban mandar mensajes de voz en modo de notas, es decir, era una comunicación asíncrona. Así se parece más a Viber o Skype, asimismo a las Hangouts de Google. Las llamadas se contienen dentro de la cuota de un dólar (cerca de 79 céntimos de euro) al año que cobra por su uso.
El funcionamiento de esta novedosa opción mejora con relación a las actuales notas de voz. La mecánica es muy entendida a la de un walkie-talkie: se pulsa el botón de grabar mientras se habla y se envía al levantar el dedo. Al recibir un mensajes, basta con bajarlo -el punto flaco de esta novedad- y se escucha. Es rápido pero no tanto como para ser una diálogo natural y fluida.
